Hoy existe un gran desafío como docentes, las políticas de ajuste y flexibilización laboral que afectan permanentemente a la clase trabajadora y nos mantiene en alerta permanente.
Los docentes hemos pasado innumerables huelgas en defensa de la educación, también acompañando a otros sectores en pos de un mejor salario que alcance a las condiciones dignas de la canasta básica total en la Patagonia.
Como docentes queremos asignarle a esta fecha simbólica del “11 de septiembre” esa connotación especial, no solo por el trabajo profesional de cada maestro, sino y especialmente por el grado de humanidad, sacrificio y dedicación que le suma horas extras a su quehacer diario, que nadie paga, pocos reconocen, pero que cada docente cumple inexorablemente porque la vocación excede una Directiva, una Resolución y hasta la propia ley que le marca limitantes, las cuales el maestro no tiene ni conoce cuando está abocado al cumplimiento de su tarea.
Los docentes santacruceños estamos acostumbrados a luchar contra adversidades e imponderables a los cuales hemos sobrevivido no abandonando la lucha, pero básicamente, nuestra historia, se resume en la magnífica tarea gremial que nos contiene, la ADOSAC, la cual ha respaldado y defendido, a lo largo de los años, nuestro derecho laboral, nuestro bienestar como trabajadores de la Educación, sometidos a los vaivenes políticos y a los gobiernos faltos de sensibilidad en un aspecto social clave, como es la educación pública.
Con 63 años de actuación gremial, los docentes santacruceños estamos orgullosos de pertenecer a un sindicato que se caracteriza por sostener y mantener en alto la dignidad del docente, desvinculando totalmente la acción sindical de la política partidaria y que ha trascendido a nivel nacional por su independencia, su capacidad de diálogo y negociación, pero también por la firmeza demostrada para plantearle al poder cualquier reclamo sobre aspectos que lesionen los derechos consagrados de cualquier docente, incluyendo aquellos que no son afiliados y necesitan la protección de una organización que vele por ellos, ante las injusticias y los atropellos de los que son víctimas.
La fecha es doblemente significativa para los docentes santacruceños, por cuanto nos encuentra unidos a pesar de tantos años y tantas adversidades en las que actuamos en total soledad, contra un poder político homogéneo y paralizador, que sin embargo, nunca hizo capitular a la ADOSAC y esta fecha donde revalorizamos al docente, nos retrotrae la memoria hacia aquellas acciones emprendidas en conjunto, que tantos logros importantes nos prodigó, pero que día a día debemos seguir esforzándonos para sostenerlos.
Las luchas que atravesamos juntos que contó con el apoyo popular, donde toda la comunidad educativa se volcaba en las plazas de cada pueblo para luchar al lado de cada maestro, es solo una parte de esa dignidad que valoramos y que nos enorgullece como gremio y como dirigentes nos compromete a mantener la coherencia histórica, sello distintivo de la ADOSAC, que nos empuja a sostener el lema sobre el cual apoyamos nuestra identidad: La Lucha no Tiene Pausa ni Condicionamientos, La Lucha Continúa….
ADOSAC