Durante el primer día de trabajo del Centro de Vacunación municipal, la secretaria de Coordinación Ejecutiva resaltó que los adultos mayores vacunados se sintieron contenidos ya que pudieron permanecer con un acompañante durante todo el proceso, desde el ingreso hasta el momento de retirarse.
Esta mañana desde las 9 comenzó a funcionar el Centro de Vacunación del municipio, instalado especialmente en el Gimnasio 17 de Octubre, del cual la Secretaria de Salud, Dra. Marcela González es responsable de la parte sanitaria y la Secretaria de Coordinación Ejecutiva, Claudia Picuntureo, responsable de logística.
Al concluir la primera jornada de trabajo, Claudia Picuntureo expresó que este primer día de funcionamiento del Centro de Vacunación municipal “es una jornada histórica” y comentó que los adultos mayores llegaron “muy emocionados y esperanzados de poder ser de los primeros en colocarse la vacuna”.
“Fue una jornada también muy emotiva para los abuelos” y comentó que comenzaban a llegar media hora antes del turno asignado, un hábito de perfecta puntualidad característico de las personas de mayor edad: “Me recordó a mi abuela de 87 años que le decís el cumpleaños es a las cuatro y está desde las dos y media lista esperando que empiece”, contó la secretaria municipal.
Picuntureo destacó que todo se desarrolló desde muy temprano en orden, sin imprevistos y tal como se planificó con “la gente muy predispuesta”. “Para nosotros es muy gratificante verlos llegar y que ellos nos elijan a nosotros como vacunatorio” indicó y recordó que en la ciudad hay dos centros de vacunación habilitados para los adultos mayores de 80 a 89 años, el Centro de Vacunación municipal en el Gimnasio 17 de Octubre y el que está funcionando en el Complejo Cultural Santa Cruz bajo la órbita provincial.
Acompañados y contenidos
“Hay que resaltar que viene el adulto mayor y al gimnasio entra con un acompañante o un familiar” que permanece con él durante todo el proceso, desde que ingresa hasta que se retira, recalcó la secretaria de Coordinación Ejecutiva quien consideró que “sí o sí tiene que estar acompañados por algún familiar, independientemente de que tengamos el personal a disposición para brindarles todo lo que ellos necesitan es importante que estén con alguien si así lo consideran”.
Al pasar al SUM -donde las personas permanecen treinta minutos luego de la aplicación de la vacuna-, cuentan con agua, café, té, caramelos o chocolates disponibles para consumir.
“Que los abuelos se vayan contentos para nosotros es lo más”, expresó Picuntureo y resaltó que para llegar a ese resultado han medido todos los detalles: “Fue mucho tiempo en lo organizativo, estar pensando en el mínimo detalle, que no falte nada” articulando con otras dependencias del municipio “son diferentes áreas y trabajadores municipales que intervinieron, coordinamos con la Secretaría de Salud que está al cien por ciento en la vacunación” y comentó que “cuando el Intendente Pablo Grasso nos encomienda algo tiene que salir a la perfección, nosotros estamos a disposición del vecino”.