El Diputado por Pueblo de Río Gallegos, Eloy Echazú, consideró poco claro y fuera de tiempo el reclamo de la CGT Zona Sur por la tasa vial que implementó el municipio local, al analizar que los dirigentes gremiales se mantuvieron en silencio durante todos estos años y ahora parecen defender a los grandes contribuyentes.
El Concejo Deliberante de Río Gallegos aprobó por mayoría la implementación de una tasa vial que grava con un 2% del valor a cada litro de combustible que sea despachado dentro del radio de la ciudad, destacándose que el monto deberá ser afrontado por las empresas expendedoras y no puede ser trasladado al consumidor final. Esta iniciativa es impulsada por la gestión del intendente Pablo Grasso y tiene como fin aumentar la recaudación para encarar todo tipo de obras necesarias para mejorar la calidad de vida de los vecinos, aunque algunos dirigentes gremiales se expresaron en contra de la medida, con argumentos “poco claros” y “fuera de tiempo”, según expresó el Diputado por Pueblo Eloy Echazú.
“Estuvieron en silencio todos estos años cuando se tocaba el bolsillo de los vecinos con los aumentos impositivos de la mala administración de Giubetich y ahora le reclaman al Intendente Pablo Grasso por una tasa que está dirigida a los grandes contribuyentes”, analizó el Diputado en referencia al reclamo de la CGT Zona Sur, afirmando además que “dicen llamar al dialogo pero en vez de comunicarse con las autoridades municipales, pagan una solicitada en el diario”.
Echazú afirmó que el reclamo de la CGT es confuso, porque “parecen desconocer que el Intendente Pablo Grasso también está trabajando sobre los contribuyentes morosos y sobre otras muchas herramientas para mejorar la recaudación”, y criticó que, además, “desconocen que esta tasa no puede ser trasladada a los consumidores, porque los expendedores de combustible no pueden aumentar arbitrariamente el valor del litro de combustible, eso está regulado por Nación, así que es falso que el vecino tenga un impacto en su bolsillo”.
Finalmente, el Diputado por Pueblo pidió a los dirigentes gremiales que “piensen un poco más en el bienestar de todos los vecinos, y reflexionen por todos estos años en los que no dijeron una palabra sobre los impuestazos que sufrimos todos, en vez de criticar a una gestión que encara cada día acciones para mejorar el desastre que dejó Giubetich en la ciudad”.
