En la 5° sesión ordinaria que se desarrolló hoy, y por iniciativa del diputado Claudio García, los legisladores aprobaron la creación del Registro Único de Personas Violentas, que tiene como fin censar a quienes hayan sido condenados por violencia de género.
Luego de un intenso debate con aportes de legisladores de ambas bancadas, el proyecto de Ley de creación del Registro Único de Personas Violentas (RUV) fue tratado en el recinto en la 5° sesión ordinaria que se realizó hoy jueves. En este marco, el diputado Claudio García, impulsor de la iniciativa, realizó un pormenorizado análisis del proyecto, que finalmente fue aprobado por unanimidad.
El RUV tiene como fin registrar a las personas que hayan sido condenados mediante sentencia judicial por violencia de género, y que hayan incumplido medidas restrictivas o tratamiento terapéutico, aclarando que se procederá a la inscripción únicamente por orden judicial, ya sea de oficio o a petición de parte.
El RUV deberá estar contenido en una base de datos central cuya guarda y conservación será responsabilidad exclusiva del Ministerio de Gobierno. Se creará una base de datos unificada que permita la elaboración de estadísticas para sistematizar la información, buscar y establecer indicadores que midan el impacto que presenta la problemática en nuestra provincia y sirvan de insumo para la determinación de políticas públicas en la temática, debiendo confeccionar el Convenio de Confidencialidad que deberá ser firmado por el responsable de cada área que intervenga en el manejo de la información del Registro Único de Personas Violentas.
Por otra parte, se contempla que el RUV expedirá certificados ante requerimiento debidamente fundado por las autoridades públicas y/o el propio interesado, en función de cualquier trámite que se efectúe en el ámbito laboral, en el juzgado de familia, penal y laboral. En los fundamentos de la iniciativa, se explica además que resulta necesario que las sentencias que condenen a las personas violentas dictadas sean debidamente registradas, con la finalidad de desalentar estas conductas e impulsar el cumplimento de las medidas dispuestas por el magistrados oportunamente, señalando además que “indudablemente, con el devenir de la vida, estas personas emprenderán otra pareja, trabajo etc. y pueden reiterar las conductas violentas, con lo cual el registro permitirá evaluar adecuadamente la conducta desplegada por estas personas, el cumplimiento o no de la sentencia y a todo evento si las acciones ameritan otras consideraciones más severas, a fin que sean efectivas y no meramente declarativas”.