A través de una conferencia de prensa, el normalizador de la UOCRA Santa Cruz, Mateo Suarez, confirmó que sí hubo disparos el jueves pasado. Informó que se presentaron como querellantes. Afirman que los violentos son “10 ratas que no quieren trabajar”. Denuncia que esta mañana les rompieron los vidrios de la sede gremial. Pidieron a la Justicia restricción de acercamiento al gremio.
Tras los hechos de público conocimiento desarrollados la semana pasada, más precisamente el jueves cuando un grupo de trabajadores de la construcción reclamaban trabajo en la sede del gremio, donde se produjeron presuntos enfrentamientos, Mateo Suarez desligo al gremio del mismo y culpo a quienes están afuera. Lo hizo a través de una conferencia de prensa aduciendo que “no les cerramos la puerta, les dimos puestos en Techint pero no quieren trabajar”. Agrega que “ellos son los violentos, vinieron armados ese día”, e insiste en que los van a desafiliar.
Por su parte, el abogado de la UOCRA, Gustavo Castro, dijo que “nos presentamos como querellantes en los expedientes que se iniciaron por los hechos ocurridos”, advirtiendo que por ello presentaron un escrito en el Juzgado de Instrucción Nº 3 de Rio Gallegos. Allí, asegura, presentaron pruebas realizando una ampliación de la denuncia, “y solicitando se imponga a estas personas que ya fueron identificadas una prohibición de acercamiento. Afirma que es con el objetivo de evitar inconvenientes, “ellos portan armas y pueden dañar a los presentes”.
Más adelante, Suarez ratifico que existieron disparos, pero asegura que no fue de ellos, que hay testigos y hasta un arma encontrada en cercanías y que pertenecerían a los presuntos agresores. Pese a que la Policía aseguró que no hubo disparos, “dentro del gremio no, fue en la calle”, afirma el dirigente. Según aporta el asesor letrado, el disparo se produjo cuando escapaban del lugar, más precisamente en la puerta de un comercio de la esquina.
Asimismo, la UOCRA tiene una cruda historia de violencia, sin embargo, Suarez insiste en que él vino como interventor desde hace un año para cambiar eso, “vine a normalizar y no busco problemas”, asegura. Consultado sobre el trasfondo de todo esto afirma que “no quieren trabajar”, aunque algunas versiones sindican estos hechos son parte de una interna gremial sobre un sindicato intervenido hace tiempo.